MADRE, MADRECITA BUENA
Madre, madrecita buena, ¡cuéntame tu pena!
Cuéntamelo todo:¿ quién borró de tu cara tu sonrisa enamorada?,
¿Quién amarró tus ágiles dedos que mis ojos de niña ayer admiraban?
¿Quién arrugó tu rostro y apagó la luz de tu mirada cubierta de canas?,
¿Quién se llevó lo que más amabas y te llenó de agujeros el alma?
Y dime:¿ por qué arrancaste el mes de Abril de tu calendario?,
No respondes, miras y callas, arrastras tu sombra cansada,
Tus pasos te pesan, vacilan tus ganas, tu cuerpo se encoge
Enmudece tu boca mientras tu mente no mienta ni palabra,
No hace falta que digas nada, que tu verdad me espanta
Me espanta tu pena, que pesa menos si tu lengua calla.
Pero aún me tienes aquí, mírame, acúname y cántame esa nana
Dime al oído que yo soy tu Estrella, tu rayito de luz de cada mañana,
Dime que nunca se apagará tu llama, dime que acabó tu condena
Madre, madrecita buena, ¡gracias por contarme tu pena!.
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Este poema participa en el
I Concurso de Poesía "Corazones Lateversos"
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